El encargo consistía en realizar una terraza de tarima de madera para el exterior, o como nos gusta a nosotros llamarlo, un deck. Este deck debía generar una superficie de circulación alrededor de la entrada principal de la vivienda y adaptarse a lo ya construido por lo que tenía que salvar varios desniveles y servir como escalera a la parte baja del terreno.
La madera elegida fue la conocida como madera tecnológica o composite. Su composición está formada por fibras de madera y plásticos procedentes de productos reciclados. No tiene el mantenimiento de la madera natural, basta con limpiarlo periódicamente, para ello hay productos especializados o simplemente con agua jabonosa. Hay varios colores que imitan la madera natural y cuenta con dos acabados, en cada cara del composite, una de ellas ranurada y otra lisa. El material dilata ligeramente con el calor.
Una de las ventajas principales del deck es su bajo mantenimiento, al contrario que las maderas de IP, que requieren de un doble tratamiento anual. Como la mayoría de los materiales construcctivos, existen diferentes calidades dentro de los composite, modelos y marcas que se adaptan a diferentes necesidades y sobre todo presupuestos. La denominada madera tecnológica es una de las soluciones más empleadas en la actualidad para sustituir la madera en exteriores no sólo en tarimas, sino también como solución para revestimientos exteriores.
El proceso de construcción de la tarima llevó un mes. La superficie total construido fueron unos 60 m2 aproximadamente. Incluyendo, escalones, acabados curvos y revestimientos de varias macetas. A continuación una galería con fotos del proceso de construcción de la casa y de la obra terminada.