La generación de estanqueidad y de hermeticidad en una vivienda son los conceptos que hacen que ésta sea energéticamente eficiente. Se trata además de dos términos que, sobre todo en el caso de una casa pasiva, marcan el desarrollo de todo el proceso constructivo. En ese sentido existen varias maneras de certificar cuál es la capacidad del edificio para mantener la temperatura interior y dar lugar a un interior estanco que irá de la mano de la eficiencia energética del inmueble. En este caso hablamos de la prueba más fiable y avanzada con la que nos aseguramos un control perfecto de los mencionados baremos.
Cómo se hace un blower door test
El rigor en la toma de datos y ejecución del proceso es imprescindible para llevar a cabo la prueba. En este caso la prueba que podemos observar en el vídeo corresponde a un test realizado por HQH Consultora en una casa pasiva que está en proceso de construcción por parte de Canexel. Se trata de una vivienda en la que ya se ha ejecutado la estructura, se han colocado ventanas y puertas exteriores y, de igual manera, se ha acabado el revestimiento exterior; en este caso, además, se ha instalado una chimenea dentro de la vivienda. Se encuentra, por lo tanto, en la primera fase de construcción en la que podemos evaluar la estanqueidad del conjunto y, por tanto, subsanar cualquier punto de fuga que encontremos antes de continuar con la realización de la obra. La prueba en sí se realiza de la siguiente manera:
- Premisas del inmueble: de los datos que se obtengan y las mediciones que se realicen sólo podrán obtenerse conclusiones relevantes si el objeto de estudio ha sido evaluado de manera correcta. En ese sentido es necesaria una toma de datos previa en cuanto a las características de la vivienda en relación con la volumetría, con el número de plantas, los metros cúbicos que nos encontramos en el interior, las estancias, la altura máxima, el número de ventanas, el número de accesos, si se dispone de campana en la cocina, si hay chimenea y de qué tipo, etc. En definitiva, es imperativo tener en cuenta cualquier baremo que pueda influir en la medición de datos relativos a la estanqueidad y eficiencia.
- Generación de espacio estanco: Para poder evaluar de manera correcta si la vivienda en sí cumple con unos requisitos en relación con la capacidad aislante que se espera será necesario la creación del mencionado ambiente hermético. Cerraremos ventanas y accesos en su totalidad, así como chimenea y campana en la medida en que vaya a estar cerrado mientras se viva en la misma vivienda, limpiando cualquier resto de cenizas que pudiésemos encontrar en el interior de la propia chimenea. Así comprobaremos de manera veraz las fugas reales que pueda haber en la casa.
- Colocación de la Blower Door: Cuando este tipo de pruebas se empezaron a desarrollar en los años 70 en Suecia la prueba se realizaba colocando un ventilador en una de las ventanas de la vivienda. En la actualidad se considera que la mejor manera de llevar a cabo el test es en la puerta principal de acceso. Sellándola en la medida de lo posible con una lona hermética, la única conexión con el exterior es un gran ventilador en la propia puerta controlado a través de un dispositivo electrónico que cuenta con un manómetro.
- Generación de subpresión: Al poner el ventilador en funcionamiento se establece que éste deberá extraer aire de la vivienda expulsándolo al exterior hasta que la diferencia de presión con el interior sea de 50 pascales. Con ello se consigue que el aire fuerce su penetración a través de cualquier rendija o resquicio que pueda encontrar.
- Evaluación de la capacidad de renovación del aire: Con la diferencia presión a 50 pascales nos encontramos ante la medida estándar para medir las renovaciones por hora de todo el volumen de aire de la vivienda. Así, se podrá evaluar la capacidad hermética de la vivienda estudiando que volumen de aire se está filtrando y esté causando un fallo de estanqueidad, siendo ésta la medida internacional que se toma como referencia. Así, por ejemplo, para considerar un grado de estanqueidad correspondiente al estándar de casa pasiva deberíamos estar hablando de menos de 0,6 renovaciones por hora con una diferencia de 50 pascales de presión. Se considera en cualquier caso que hasta 3 renovaciones por hora estamos hablando de una casa bien aislada.
- Test termográfico: Inevitablemente nos vamos a encontrar con filtraciones de aire en sitios como cajas de persianas, juntas de fachada, chimenea, etc. Para encontrar dichos puntos de fuga se emplea una cámara termográfica que, mediante visión infrarroja, muestra los lugares por los que está penetrando el aire en la vivienda. Generalmente se buscan los puntos de riesgo más habituales aunque, cuanto más exhaustivo sea el control más se podrá mejorar la eficiencia. Al hacer esta prueba en una vivienda en construcción será más sencillo subsanar cualquier fallo, por nimio que sea, que pueda afectar a la hermeticidad. En edificios ya construidos nos mostrará los puntos a subsanar para mejorar la eficiencia y, por tanto, el ahorro energético.
- Generación de sobrepresión: Con los puntos detectados a nivel interior es interesante también ver en el exterior por donde pueden estar produciéndose las fugas. Si se da la vuelta al ventilador crearemos el efecto inverso al introducir aire del exterior en el interior aumentando la presión.
- Máquina de humo: Dado que el aire buscará entonces escapar de la casa, con una máquina generadora de humo desde el interior se harán visibles los puntos de fuga desde el exterior. Así sabremos los puntos exactos tanto fuera como dentro en los que se está produciendo una fuga de aire.
Para qué sirve el blower door test
Con esta serie de pruebas conseguiremos detectar los fallos constructivos y estructurales que puedan acabar dando lugar a filtraciones y pérdidas energéticas y fallos por tanto en la eficiencia de la vivienda. Si se realizan estas pruebas durante la obra seremos por tanto capaces de subsanar posibles errores constructivos, algo que en sistemas convencionales de construcción suele hacerse evidente en grietas en cubiertas y fachadas. El sellado en sistemas alternativos como el de entramado ligero de madera, por ejemplo, se realiza de manera mucho más eficiente y segura dando lugar a compartimentos mucho más estancos.
Blower door y casa pasiva
La casa pasiva y el test blower door son dos conceptos que van de la mano. Y es que, al tratarse de un tipo de vivienda en el que la hermeticidad y la estanqueidad han de ser prioritarias es necesario ir revisando esas capacidades periódicamente durante la ejecución de la casa. Una vez que al estructura está finalizada, cuando se llevan a cabo las instalaciones, cuando se coloca el aislamiento, al finalizar la casa, etc. Cada etapa en la que se pueda estar afectando la integridad hermética del edificio ha de ser controlada de manera científica a través de pruebas que, como el blower door test, nos permitan subsanar los posibles defectos constructivos que puedan evitar que la capacidad eficiente de la vivienda disminuya.