En breve en Canexel comenzaremos la construcción de un restaurante en la provincia de Ávila. Más allá de las viviendas unifamiliares, lo cierto es que el sistema canadiense se emplea cualquier tipo de construcción gracias sobre todo a su versatilidad y a su capacidad de adaptación a las necesidades que puedan surgir según el uso que se planee para el edificio. En Canexel ya hemos afrontado en ocasiones la construcción de muy distintos tipos de obra, desde locales comerciales hasta aularios universitarios. De hecho es cada vez más común, en los países donde el entramado ligero es el sistema “tradicional”, afrontar la ejecución incluso de rascacielos.
Ventajas de construir un restaurante con Canexel
Todos los diseños que realizamos, sin excepción, se realizan completamente a medida de cada cliente. En ese sentido, por específica que sean las necesidades que se tengan, nosotros nos adaptamos a lo que cada cual requiera. Ello cobra especial relevancia cuando no hablamos de una vivienda, sino de un tipo de construcción que ha de cumplir con unos requisitos que no son los habituales. Desde legislación hasta las condiciones para poder adaptar instalaciones y estancias amplias y diáfanas, todo implica un servicio a medida. Nuestro sistema, dada su ligereza, facilita el hecho de poder diseñar y ejecutar plantas totalmente diáfanas solucionándolas de manera sencilla como por ejemplo ha sido el caso en este proyecto.
Características del restaurante construido en madera
Lo que más llama la atención en este caso es la gran sala principal del restaurante de más de 170 metros cuadrados de superficie. Totalmente diáfana, no hay ninguna columna entre los dos muros laterales. Dos grandes vigas de más de 13 metros de longitud atraviesan la sala longitudinalmente siguiendo la línea del techo catedralicio. Esta sala cuenta además con varios grandes ventanales que hacen que esta sala principal tenga una iluminación acorde a su amplitud.
Por otro lado, la otra sección del edificio no ha requerido de tanta diafanidad ya que es donde se encuentran, por un lado los servicios y por otro un almacén y la cocina. Además, esta construcción cuenta con un porche cubierto de casi 80 m2 con un tragaluz que es ideal para los meses de verano. Todo ello bajo una cubierta de pizarra natural y con un revestimiento en multicapa acrílico y composite.
Este restaurante es, en definitiva, un claro ejemplo de la versatilidad del sistema constructivo canadiense. Cualquier construcción, cualquier idea se puede llevar a cabo si se realiza de manera profesional. A punto estamos de comenzar esta obra y en pocos meses podréis verla completamente terminada. De momento os ofrecemos la oportunidad de decorarla y amueblarla a vuestro gusto:
