

Interiores abiertos y limpios
En el interior de la vivienda se produce una dialéctica entre tonos claros y oscuros. Esto genera unos ambientes acogedores al combinar pilares y vigas en madera ligera con carpinterías y detalles en negro. Todo ello en estancias abiertas y espacios que dialogan, desde la cocina y el salón hasta el resto de habitaciones, incluyendo una sala de juegos que se proyecta desde el propio salón.
Lo mismo sucede en la zona privada donde la habitación principal se expande a través de un gran vestidor y de un baño en suite. A ello le acompañan las dos habitaciones gemelas, todas asomándose al paisaje a los pies de la parcela.
De cara al exterior la pérgola que hace las veces de porche social mantienen la estética y el compromiso con el estilo arquitectónico de la vivienda. El blanco juega con la luz para una luminosidad exterior acorde con el clima y el ambiente mediterráneo de la ubicación de esta espectacular vivienda.